Se tuvieron que excavar y exponer los cimientos del edificio de la Corte Suprema de Justicia para poder reforzarlos y además construir muros de corte nuevos desde cimientos hasta el piso 10. Todo se tuvo que realizar estando en operación normal el inmueble durante toda la intervención, lo cual requirió mucha planeación y coordinación para no afectar a los usuarios.